viernes, 15 de febrero de 2008

El Mito De Sísifo


Los dioses habían condenado a Sísifo a empujar sin cesar una roca hasta la cima de una montaña, desde donde la piedra volvería a caer por su propio peso. Habían pensado con algún fundamento que no hay castigo más terrible que el trabajo inútil y sin esperanza.
(…)
Sísifo es el héroe absurdo. Lo es en tanto por sus pasiones como por su tormento. Su desprecio de los dioses, su odio a la muerte y su apasionamiento por la vida le valieron ese suplicio indecible en el que todo el ser dedica a no acabar nada. Es el precio que hay que pagar por las pasiones de esta tierra. no se nos dice nada sobre Sísifo en los infiernos. los mitos están hechos para que la imaginación los anime. Con respecto a éste, lo único que se ve es todo el esfuerzo de un cuerpo tenso para levantar la enorme piedra, hacerla rodar y ayudarla a subir una pendiente cien veces recorrida; se ve el rostro crispado, la mejilla pegada a la piedra, la ayuda de un hombro que recibe la masa cubierta de arcilla, de un pie que la calza, la tensión de los brazos, la seguridad enteramente humana de dos manos llenas de tierra. Al final de ese largo esfuerzo, medido por el espacio sin cielo y el tiempo sin profundidad, se alcanza la meta. Sísifo ve entonces como la piedra desciende en algunos instantes hacia ese mundo inferior desde el que habrá de volverla a subir hacia las cimas, y baja de nuevo a la llanura. Sísifo me interesa durante ese regreso, esa pausa. Un rostro que sufre tan cerca de las piedras es ya él mismo piedra.
Veo a ese hombre volver a bajar con paso lento pero igual hacia el tormento cuyo fin no conocerá. Esta hora que es como una respiración y que vuelve tan seguramente como su desdicha, es la hora de la conciencia. En cada uno de los instantes en que abandona las cimas y se hunde poco a poco en las guaridas de los dioses, es superior a su destino. Es más fuerte que su roca. Si este mito es trágico, lo es porque su protagonista tiene conciencia.
¿En qué consistiría, en efecto, su castigo si a cada paso le sostuviera la esperanza de conseguir su propósito? El obrero actual trabaja durante todos los días de su vida en las mismas tareas y ese destino no es menos absurdo.
Pero no es trágico sino en los raros momentos en se hace consciente. Sísifo, proletario de los dioses, impotente y rebelde conoce toda la magnitud de su condición miserable: en ella piensa durante su descenso. La clarividencia que debía constituir su tormento consuma al mismo tiempo su victoria. No hay destino que no venza con el desprecio.
(…)
Por lo tanto, si el descenso se hace algunos días con dolor, puede hacerse también con alegría. Esta palabra no está de más. Sigo imaginándome a Sísifo volviendo hacia su roca, y el dolor estaba al comienzo. Cuando las imágenes de la tierra se aferran demasiado fuertemente al recuerdo, cuando el llamamiento de la dicha se hace demasiado apremiante, sucede que la tristeza surge en el corazón del hombre: es la victoria de la roca, la roca misma. La inmensa angustia es demasiado pesada para poderla sobrellevar. Son nuestras noches de Getsemaní.
En el universo vuelto de pronto a su silencio se alzan las mil vocecitas maravillosas de la tierra. Llamamientos inconscientes y secretos, invitaciones de todos los rostros constituyen el reverso necesario y el premio de la victoria. No hay sol sin sombra y es necesario conocer la noche. El hombre absurdo dice que sí y su esfuerzo no terminará nunca. Si hay un destino personal, no hay un destino superior, o, por lo menos no hay más que uno al que juzga fatal y despreciable. Por lo demás, sabe que es dueño de sus días. En ese instante sutil en que el hombre vuelve sobre su vida, como Sísifo vuelve hacia su roca, en ese ligero giro, contempla esa serie de actos desvinculados que se convierten en su destino, creado por el, unido bajo la mirada de su memoria y pronto sellado por su muerte. Así, persuadido del origen enteramente humano de todo lo que es humano, ciego que desea ver y que sabe que la noche no tiene fin, está siempre en marcha. La roca sigue rodando.
Dejo a Sísifo al pie de la montaña. Se vuelve a encontrar siempre su carga. Pero Sísifo enseña la fidelidad superior que niega a los dioses y levanta las rocas. Él también juzga que todo está bien. Este universo en adelante sin amo no le parece estéril ni fútil. Cada uno de los granos de esta piedra, cada trozo mineral de esta montaña llena de oscuridad forma por sí solo un mundo. El esfuerzo mismo para llegar a las cimas basta para llenar un corazón de hombre.
Hay que imaginarse a Sísifo dichoso.

ALBERT CAMUS

2 comentarios:

Javier dijo...

Todos llevamos nuestra piedra, todos llevamos nuestra cruz... pero hasta los dioses son humanos, porque nosotros los creamos, ellos tienen de nosotros porque son escencia de nosotros... cuando podamos comprenderlos (de existir dioses) sera porque seremos dioses.
Nada es imposible si podemos imaginarlo.
Somos los dioses, bestia, demonios... cargamos con nuestras penas y tratamos de alejarlas con palabras ya que de esta forma sera otro el que sufra por nosotros, pero aun asi nadie sufre mas que uno mismo...
El dia se apaga y llega la noche para morir nuevamente y empezar nuevamente el espectaculo. Nadie quiere saber el dia en que va a morir pero yo ya odio el saber que morire.
Quiero que alguien me ayude ¿ Puede alguien ayudarme ? estamos solos en nuestro camino, encerrados en nuestro cuerpo, el lugar de donde no podemos escapar.
Solo existen dos formas, tan solo dos de escapar, pero no son eternas, es mas son efimeras: cuando se duerme y cuando se ama. Pero la piedra estara nuevamente en la base y ese descanso, ese momento celestial desaparecera para volver a sufrir levantando la piedra.
La dicha de levantar la piedra reside solamente en saber que cuando llegue arriba tendreos un momento en que seremos, celestiales, intocables... ese seria mi motivo para poder subir la piedra nuevamente... sentir la libertad que solo da el volar.
El precio es caro, volver a levantar la pirdra..
A pagar señoras y señores que el precio es caro pero vale la pena.

(Aclaracion: Nunca se lo que escribo, tan solo divago y al terminar leo lo que puse es por eso que el 99% de las veces no tiene nada de sentido lo que escribo)

Javier dijo...

Mis protagonistas aun no saben de mi existencia y seria bueno que nunca lo sepan, deve ser horrible saber que la vida de uno esta definida y dictada por una perversa mente que no tiene otra cosa mejor que hacer... jajaja
Mi libro es malisimo no por el contenido sino por la gramatica, la ortografia... por todas esas cosas que uno deveria aprender en lengua. Ya la he modificado decenas de veces y nunca me convense, le falta pulirla muchisimo. Tenia una pequeña continuacion, pero el querido Flog se encargo de no postearlo y al no guardarlo primero se perdio en aguas turbias y nunca mas se recuperara, desde ese entonces no lo segui mas. Tendria que ponerme un dia a escribir aunque mas no sea un par de lineas.

La vida (al menos eso creo) no se basa en buscar el amor, ni la piedra filosofal, ni porque vivimos... La vida es como es, asi como 1 + 1 son 2 tenemos que tomar la vida tal cual esta y lo importante es ser feliz, buscar lo que nos haga bien. El camino es largo pero no eterno, disfrutemos del paisaje y cuando hay a un problema seremos mejores porque tambien aprenderemos. El amor es grande, tanto que esa palabra se queda chica, no solo se trata de dos personas que se quieren, se trata de una gran parte de la vida, pero tambien existen otras cosas, como alguien dijiera: El amor es como la sal, un poco da sabor pero es horrible comer sal sola.
Nadie nace atado ni nadie merece que se le ate, somos libres en un mundo de encierros y eso tambien es parte de la vida. Debemos buscar ese cachito, ese lugarcito y aunque sea un centimetro seremos dioses, estaremos vivos, seremos libres. Tan solo y quizas ni siquiera un centimetro sea pero nadie nos lo va a quitar, eso nadie lo puede hacer.

Bueno, todo este embrollo es solo para decirte que no hay problemas si queres poner algo de lo que escriba, no hace falta que lo pidas eso si: No me hago responsable de los problemas y daños causados. jaja

Besos